Aunque se ignora con exactitud el año, es lo cierto (según respetabilísima tradición) que hace tres centurias salió de Cuart un dichoso molinero a buscar aguas, el día 10 de Junio, y aconteció lo que voy a relataros:
Quería el molinero conducir las aguas a su casa y pueblo, mas Dios le había destinado para que diese un Patrón a esta deliciosa llanura y población hermosa, donde compite lo ameno y fértil con lo abundante y bello, y se llama Cuart de Poblet.
Se vio con un venerable anciano de carácter bondadoso, dulce, simpático, apacible, con espesa cabellera y pobladísima barba; conociendo al instante que se trataba de un ser extraordinario por la majestad de su continente, lo atractivo de sus miradas lo halagüeño de su conversación y lo singular de sus ademanes.
Yo soy Onofre (dijo muy pronto al molinero) y son mis deseos que se levante un monumento en este lugar para eterna memoria de los beneficios que dispensa Dios por mi mediación a los hijos de Cuart que me aclaman por Patrono. Ahora elijo este sitio para darles aun más pruebas de mi cariño: di a tus paisanos que construyan aquí una ermita donde la memoria de Onofre sea honrada con culto perpetuo...
Entonces el molinero teme que los del pueblo no le crean, tomándole por un iluso o tal vez soñador, y replica, con respeto, al venerable anciano, que se halla dispuesto a obedecer e intimar la orden a sus paisanos, pero que necesita una señal que así lo acredite.
Onofre, accediendo a sus deseos, escribe con su dedo en el brazo del molinero, con letras de oro, estas palabras:
Soy Onofre, y en todo riesgo, aquí estoy; añadiendo en voz alta: No temas al violento ataque del enemigo, porque os amparo y defiendo yo...
El molinero, lleno de alegría, se dirige al pueblo para declarar el mensaje feliz, escrito en su brazo izquierdo; el vecindario en masa se conmueve; todos contribuyen a la construcción de la ermita; los pueblos acuden a ella desde tiempo inmemorial; el Santo anacoreta recibe las plegarias de los afligidos que imploran su protección, para dispensar beneficios, y las generaciones todas le festejan con esplendor, pompa y entusiasmo delirante, gritando mujeres y hombres, niños y ancianos, doncellas y mancebos:
¡Viva San Onofre!
¡Viva el glorioso Patrón de Cuart de Poblet!
GOZOS A SAN ONOFRE ANACORETA
Rey, anacoreta, abad,
asombro de perfección.
Sednos, Onofre, Patrón
en cualquier adversidad.
Naciendo rey en Hungría,
al punto que a luz salisteis
las tinieblas confundisteis
que Lucifer oponía:
ya desde entonces temía
vuestra heroica santidad.
Sednos, etc.
Por astucia de Luzbel
fuiste arrojado en el fuego
mas quedando intacto luego
un ángel os libró de él:
El Arcángel San Rafael
os guió en la soledad.
Sednos, etc.
De la leche os dio el sustento
una cierva en el camino
nutriz que el cielo previno
para que os fuese el portento
con natural alimento
desde vuestra tierna edad.
Sednos, etc.
Vuestro almuerzo cada día
ofreciendo a Jesús Niño
un pan os dio con cariño
de los pechos de María:
que en tal despensa sería
candor de virginidad.
Sednos, etc.
Del mundo estando en olvido
fuiste a la corte llamado
mas apenas coronado
la corona habéis huido:
desprecio que os ha añadido
la mayor preciosidad.
Sednos, etc.
Rey mendigo, peregrino,
a Egipto peregrináis,
y en un monasterio halláis
el refugio y el destino
y por el instinto divino
os eligen por abad.
Sednos, etc.
En la Eucaristía os habló
el oráculo divino
y dándoos nuevo destino
de un peligro os avisó:
del monasterio os mandó
pasar a la soledad.
Sednos, etc.
Una choza os dio guarida
por ángeles fabricada
donde hallasteis preparada
en una fuente bebida,
y en la palma prevenida
frutos de inmortalidad.
Sednos, etc.
Su pan cada octavo día
ángeles os ministraban
por regalo os preparaban
la mesa en la Eucaristía:
todo el cielo concurría
a tanta solemnidad.
Sednos, etc.
Setenta años penitente
en yermo habéis vivido
vuestros cabellos vestido
os ofrecieron decente:
sólo Pafnucio presente
atestiguó la verdad.
Sednos, etc.
La cueva al morir cayó,
Jesús os dio bendiciones,
el sepulcro dos leones
y la fuente se secó;
la palma al cielo voló
triunfo de la eternidad.
Sednos, etc.
De Dios para sus devotos
logró Onofre con su ruego
librarles de rayos, fuego,
tempestades, terremotos;
la gracia de Dios sin cotos
la eterna felicidad.
Sednos, etc.
Vos mismo habéis ofrecido
en muchas apariciones
el llenar de bendiciones
al que os invoca rendido.
Algemesí fiel ha sido
testigo de esa verdad.
Sednos, etc.
Pues dais vuestra protección
con tal liberalidad:
Sednos, Onofre, Patrón
en cualquier adversidad.
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