Gaspar, Melchor y Baltasar,
que fuisteis a ver a Jesús
cuando nació de la Virgen María,
os ruego por esa dulzura que sentisteis ante Él
cuando fuisteis en su búsqueda,
y por esa alegría que sentisteis
al encontrarle y ofrecerle sus dones,
que me aconsejéis sobre qué debería pediros
en la medida en que Dios os escuchó
y aceptó vuestros regalos.
Santísimos Reyes Magos,
que con tanta perseverancia
buscasteis y hallasteis,
al único Rey de Reyes
para poneros a su servicio
y mostrarle vuestro amor,
llegad una vez más a los hogares,
y traed a todas las familias
la salud, la paz, el amor,
y en definitiva la felicidad
que todos ansiamos encontrar.
Oh Dios, Santo y Verdadero,
precioso Niño Jesús,
como tu aceptaste sus obsequios,
recibe hoy mi oración por su amor;
y como la Estrella apareció ante ellos en el oriente,
conduciéndolos ante ti,
al lugar que buscaban,
que desearon grandemente,
así también, Niño Dios,
colma mis deseos con el gozo y la alegría.
Concédeme que pueda tener y contemplar
lo que mi corazón desea,
para la alabanza de Dios
y de mi Señora Santa María.
Amen.
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