De bondad y belleza inigualable,
eres Santa entre las santas,
Virgen de Regla, amada
poderosa, reverenciada, gloriosa.
Tu bondad se vuelve caridad
y yo siento en el alma mía,
tu amor, protección y paz
cada uno de mis días
que tu llenas de felicidad.
Oh Madre mía querida,
Vos que sois el dulce amparo
y el vivo consuelo de los afligidos,
dirigid hacia este humilde pecador
una sola mirada de compasión,
porque hoy, mi alma, Madre mía,
está afligida y llena de dolor.
Madre amorosa, yo confío en Vos,
en vuestra inagotable misericordia,
y con el corazón atormentado y roto
a ti suplico tu ayuda,
que me ayude a recuperar
la felicidad perdida.
(Hacer la Petición)
!Que dicha! ¡Que alegría!
si con tu ayuda consigo
que mi amor vuelva al hogar.
Que nuestra familia volviese a ser
tan unida como era,
y que siempre reine en ella
amor, armonía y paz.
Amén
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