SAN GABRIEL ARCÁNGEL: TRES ORACIONES MILAGROSAS

 

Gabriel significa «Varón de Dios», «Fortaleza de Dios» o bien «Dios fuerte». El fue el escogido por Dios para llevar un mensaje a la Virgen María, o sea, el de anunciarle el misterio de la Encarnación.

 

San Gregorio Magno pregunta por qué este ángel fue preferido a otros ángeles para anunciar este gran misterio, y contesta:

 

«Es que la Encarnación del Hijo de Dios es un misterio tan sublime y tan dificil que Dios ha intervenido con todo su poder».

El arcángel San Gabriel, tomando forma humana, se acercó con profunda humildad y reverencia ante la Virgen que se hallaba en su casita de Nazaret, sin duda en altísima contemplación, y le dijo:

 

«Salve, llena de gracia, el Señor es contigo».

 

Ella, al oír tal salutación, se turbó y discurría qué podría significar aquello. Entonces le dijo el ángel:

 

«No temas, María, porque has hallado gracia delante del Señor, concebirás en tu seno y darás a luz un hijo, a quien pondrás por nombre Jesús. El será grande y llamado Hijo del Altísimo»... (Lc.1,26-31).

 

Al contestarle María que cómo podrá ser madre sin perder su virginidad, y oírle ésta la explicación de que concebiría por obra del Espíritu Santo, Ella le dio su conformidad, y al decir: He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra, el ángel se retiró.

 

En el libro de Daniel se dice explícitamente que el ángel Gabriel es el que explicó al profeta algunas visiones (Dn.8,16 s:9,21).

 

El arcángel San Gabriel está asociado a los últimos tiempos (Dn. 8,16-17) y también vemos en el Evangelio de San Lucas que se apareció al sacerdote Zacarías para anunciarle la próxima venida de San Juan Bautista (Lc.1,11 y 19).

 

A este arcángel se le menciona en diversos textos litúrgicos antiguos. En el siglo IX apareció su fiesta unida a la de la Anunciación. Su fiesta la extendió Benedicto XV a toda la Iglesia. En la reforma del calendario hecha por Pablo VI en 1969, se trasladó su fiesta al 29 de septiembre, uniéndola a la de San Miguel y San Rafael.

 

ORACIÓN PARA ENCONTRAR CONSUELO Y PAZ

Oh, amoroso mensajero de la Encarnación,

desciende sobre todos aquellos

para quienes deseo paz y felicidad.
 

Extiende tus alas sobre las cunas

de los bebés recién nacidos,

oh tú que anunciaste la venida del Niño Jesús.

Dale a los jóvenes un pétalo de lirio

del cetro virginal de tu mano.
 

Haz que el Ave María haga eco

en todos los corazones

para que puedan encontrar gracia, consuelo

y alegría a través de María.

Finalmente, recuerda las palabras sublimes

pronunciadas el día de la Anunciación:

 

"Nada es imposible para Dios",

y repítelas en horas de prueba,

a todos lo que amas,

para que su confianza en Nuestro Señor

pueda ser recordada por todos,

cuando la ayuda humana falla.

Amén.

ORACIÓN PARA HACER PETICIONES

San Gabriel Arcángel,
Dios te envió a Daniel para que lo atendieras
porque era amado por Dios;

Te envió a Zacarías para asegurarle

que sus oraciones habían sido escuchadas;

Te hizo el Ángel de la Encarnación
cuando te designó especialmente
para anunciar que Dios el Hijo se haría hombre
en el vientre de la Santísima Virgen María.

Por tu intercesión,
que María sea una Madre tierna y devota para mí,
como lo fue para Jesús.

Tu nombre significa "la fuerza de Dios",
porque Dios te eligió para escuchar

y consolar a su pueblo en sus aflicciones.

Pido las gracias y las virtudes que necesito
para perseverar en la lucha por la santidad de la vida.

Dame firmeza mis resoluciones,
renueva mi coraje,
consuélame y auxíliame
con los problemas, las pruebas

y los sufrimientos de la vida cotidiana,
mientras consuelas a José en sus pruebas,

a María en sus penas
y a Jesús en su agonía en el Huerto.

San Gabriel, pongo mi confianza en ti.
Gran siervo de Dios, por favor ora por mí 

e intercede en todas mis necesidades y deseos.

A través de tu sincero amor por Jesús,

quién es Dios encarnado,
y por su bendita Madre, María,
te ruego que ores por mí

para que se me conceda mi petición,
si es la voluntad de Dios.

 

(Hacer una súplica a San Gabriel)
 

Dios todopoderoso y eterno,
que elegiste al Arcángel Gabriel

de entre todos los ángeles
para anunciar el misterio

de la Encarnación de Tu Hijo
concede misericordiosamente

que los que honramos a San Gabriel en la tierra
podamos sentir el beneficio de su patrocinio en el cielo,
 donde vives y reinas por siempre.

Amén

ORACIÓN ANGEL DE LA FUERZA

¡Ángel de fuerza, amigo de la humanidad!

Continúa tu ministerio de ayudarnos.

Estamos rodeados de terribles enemigos:
nuestra debilidad los hace atrevidos;
Ven en nuestra ayuda,

y procúranos valor.

Ruega por nosotros durante estos días

de incertidumbre, conversión y penitencia.

Obtén para nosotros el conocimiento

de todo lo que le debemos a Dios
como consecuencia de ese inefable

misterio de la Encarnación,
del cual fuiste el primer testigo.

Si te hemos ofendido:

 ilumínanos para que, de ahora en adelante,
podamos ser fieles a tu enseñanza y ejemplo.

Levanta nuestros pensamientos

a la morada feliz donde moras;
ayúdanos a merecer los lugares

que dejaron vacantes los ángeles caídos,
porque Dios los ha reservado

para los elegidos entre los hombres.

Reza, oh Gabriel, fieles de la Iglesia,
y defiéndela contra los ataques del infierno.

Los tiempos son malos;
Los espíritus de la maldad se desatan,
y no podemos enfrentarnos a ellos
sin la ayuda de Dios.

Es por sus santos ángeles
que El le da la victoria a su católica esposa.

Oh fortaleza de Dios, sé primero en las filas.

Disuelve la herejía, acaba con el cisma
que frustra sabiduría de los hombres,

que frustra la política del mundo,
despierta a los bienintencionados de la apatía;
para que Dios reine sobre la tierra que ha redimido,
y para que cantemos junto contigo

y con todo el coro angelical:

"¡Gloria a Dios, paz a los hombres!"